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MEDIA COLUMNA
Cacería de gansos
Jorge Morelli
@jorgemorelli1
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Jorge Baca Campodónico, ex ministro de Economía, alimentó esta semana
la máquina del modelo PREDICE –que EXPRESO presentó este último verano- con los
datos de los planes de gobierno de PPK y Fuerza Popular. El resultado que la
máquina arroja es que el programa de Keiko es mejor.
El plan de PPK produciría un mayor crecimiento al principio, pero
sobre la base de mantener el actual déficit fiscal de tres por ciento a lo largo
de los próximos cinco años. Esto tendría fuertes consecuencias en el tamaño de
la deuda externa necesaria para financiar ese déficit.
El problema de PPK nace de su insistencia en reducir el IGV
en tres puntos. Esto haría caer la recaudación
fiscal fuertemente. PPK asegura, sin embargo, que recuperaría con creces
la pérdida mediante la formalización de una cantidad importante de empresas
informales.
Las atraería –píensa- con la promesa del acceso al crédito, a cambio
de lo cual les aplicaría un régimen tributario de 10% sobre sus utilidades o de
dos y medio por ciento sobre sus ventas.
Es una apuesta. No existe certidumbre de que una
mayoría de empresas informales vaya a aceptar ese canje. La presunción de que
es una buena medida parte de un principio téorico -llamado el efecto Olivera-Tanzi
(en versión invertida, digamos)-, según la cual debería aumentar la recaudación
si se reduce la tasa del impuesto. Parece asunto de sentido común.
Esto, sin embargo, se aplica bien a a quien ya paga un impuesto. No
dice nada respecto de un sector informal que no lo ha pagado nunca.
El hecho de que parezca un buen negocio en el papel y parta de
una premisa racional no es garantía. La premisa de una misma racionalidad
económica no se aplica siempre en todos los contextos.
Existe una rama de la economía denominada sustantivista (Karl Polanyi),
que se aparta de la premisa de racionalidad de la economía clásica para
adentrarse en conductas económicas que obedecen a una “racionalidad “
alternativa. El caso clásico es el del visitante del siglo XIX a un grupo
étnico primitivo en una isla del Pacífico que vive de la tala y venta de
madera. El visitante observa que se tala con hacha de madera. Dona entonces un
cargamento de hachas de acero. Espera que se duplique la producción. Pero ocurre que en adelante todos trabajan la mitad del tiempo. El "beneficio" es más tiempo libre para otras actividades.
No es una conducta irracional, solo obedece a una racionalidad en la
que la premisa de la maximización del beneficio abarca también a otros “beneficios”.
Es por eso que no puede asumirse automáticamente que un sector informal
complejo, con muchas variantes distintas y que jamás ha pagado impuesto alguno,
vaya a abonarlo masivamente a cambio de un acceso al crédito que
hipotéticamente compensa el pago de un impuesto y la pérdida del anonimato en que se desenvuelve su actividad.
Asumir de manera automática que eso va a suceder porque es “racional”
puede conducir a una equivocación monumental y a la virtual imposibilidad de lidiar con las consecuencias del error una vez cometido.
Es posible que la crítica pueda hacerse también al programa de formalización de Fuerza Popular –que
propone un “IGV justo”-. Pero hay una diferencia fundamental Si el modelo PREDICE arroja
un mejor resultado para Fuerza Popular es porque su programa no deja de lado la
prudencia. Corre un riesgo limitado y no propone reducir la tasa del impuesto
general. No arriesga tres puntos del IGV en una posible cacería de gansos.
REPORTE DE NOTICIAS en Internet
Las
siguientes notas periodísticas de política y economía han sido seleccionadas,
editadas y ordenadas
temáticamente. No se las debe citar como
tomadas directamente de sus fuentes originales, las mismas que se indican sólo
como una forma de reconocer el crédito y agradecer la cortesía.
LIBERTAD ECONOMICA,
GLOBALIZACION, REFORMAS, INVERSION
Expreso
Los planes de gobierno de Fuerza Popular y PPK y el
futuro de la economía
Jorge Baca
Campodónico
Quedan apenas dos
semanas para que el electorado acuda a las urnas. Lamentablemente la segunda
vuelta ha estado plagada de insultos, denuncias e intentos de descalificar al
rival. En el debate técnico, realizado en el Cusco, no se tocaron aspectos
fundamentales de los planes de gobierno como la formalización de la economía y
la flexibilización laboral.
En esta entrega,
utilizando el modelo de equilibrio general de PREDICEperú, analizamos los
planes de gobierno en temas económicos de los dos candidatos que definen en
segunda vuelta la presidencia del país.
Debemos remarcar,
como lo hicimos en una entrega anterior, que el modelo PREDICEperú no sólo
simula la evolución de los principales agregados macroeconómicos (PBI, inflación,
consumo, déficit público, RIN, etc.) sino también la evolución de la pobreza y
la desigualdad. Estos dos últimos indicadores son importantes para evaluar el
impacto en la población de una elevación de la inflación como resultado de un
aumento descontrolado del gasto público. No hay peor impuesto que el impuesto
inflacionario, que incide especialmente en los más pobres.
Para fines
comparativos se ha definido un escenario base contra el cual comparamos los
resultados de la simulación de cada plan de gobierno. El Escenario Base asume
la continuidad de la actual política económica.
Los supuestos
contenidos en cada plan que se han utilizado para la simulación del modelo son:
(a) nivel de inversión pública en infraestructura; (b) el grado de
flexibilización laboral; (c) nivel de inversión privada especialmente
extranjera; (d) formalización de la economía asociada al aumento de
productividad; (e) la reducción/aumento de impuestos; (f) independencia del BCR
en el combate a la inflación; (g) el aumento del gasto público corriente; (h)
aumento del salario mínimo; (i) fomento del ahorro a través de las AFP’s; (j)
reforma de la ley de la descentralización y coparticipación de impuestos; (k)
reforma tributaria y de la SUNAT; (l) revisión de los Tratados de Libre
Comercio; y (m) gastos en Educación y Salud.
En el caso de
inversión pública se ha asumido que ambos planes la aumentan
significativamente.
En el caso de la
formalización se ha asumido que el plan de Fuerza Popular obtiene mejores
logros en la disminución de la informalidad. Los supuestos sobre la carga
impositiva son los que presentan más diferencias.
En el caso de
Fuerza Popular se ha asumido que se revierten los beneficios tributarios
otorgados por el actual gobierno y se simplifica el pago del IGV (“IGV justo”).
En el caso de PPK
se asume una significativa disminución de la carga tributaria (depreciación
acelerada, continuación de los beneficios tributarios otorgados por este
gobierno, reducción progresiva del IGV, y eliminación parcial de
la CTS).
En lo que respecta
al gasto público corriente se ha asumido que ambos planes mantienen los
programas sociales, lo que se traduce en un incremento moderado del gasto
social.
En el caso del
salario mínimo, se ha asumido que el plan de PPK es más agresivo en el
aumento del salario mínimo que el de Fuerza Popular.
En el caso de
la descentralización se ha asumido que Fuerza Popular aumenta en un punto
porcentual la coparticipación del IGV en el FONCOMUN.
Los planteamientos
sobre temas de seguridad, si bien importantes en el quehacer económico y en el
presupuesto público, no han sido considerados explícitamente en el análisis
debido a las limitaciones del modelo de equilibrio general. Sin embargo se ha
asumido que en ambos planes se incrementa gradualmente el presupuesto de gasto
corriente para cubrir el aumento a los efectivos de la Policía.
(…)
Las simulaciones
del modelo indican que el plan de gobierno que ofrece las mejores propuestas es
el de Fuerza Popular.
El plan de gobierno
de Fuerza Popular permite un bienestar global superior al escenario base en
todo el periodo de simulación.
El plan de PPK
ofrece un bienestar superior al escenario base sólo en los primeros años del
periodo de simulación para luego deteriorarse y terminar por debajo del índice
de bienestar global del escenario base.
Al final del
periodo de simulación (2021) el bienestar alcanzado con el plan de Fuerza
Popular es significativamente mayor al bienestar alcanzado por el plan de
gobierno de PPK.
La propuesta
de Fuerza Popular ofrece la mejor opción para aumentar la
productividad del sector informal. La incorporación de Hernando de Soto al
equipo de Fuerza Popular, especialista internacional en temas de informalidad
garantiza una reducción progresiva de la informalidad en todos los sectores de
la economía.
En un escenario de
precios de minerales deprimidos, el aumento de la productividad del sector
informal, especialmente de la agricultura y minería es clave para el
crecimiento sustentado de la economía en el mediano plazo. El problema de la
baja productividad del sector informal no sólo es un problema de tasas
impositivas. Es también un problema de derechos de propiedad, capitalización,
acceso al crédito y a los mercados externos. El plan de formalización de Fuerza
Popular con Hernando de Soto es integral y contempla todos los problemas antes
mencionados.
La principal
característica del plan de gobierno de Fuerza Popular es la prudencia fiscal
tanto por el lado de los impuestos como por el lado de los gastos. La
simulación del Plan de Gobierno de Fuerza Popular arroja tasas de crecimiento
ligeramente inferiores a las tasas de crecimiento del plan de PPK en los
primeros años como consecuencia de la prudencia fiscal implícita en el plan de
Fuerza Popular, especialmente por el lado de la reducción de
impuestos.
Sin embargo en el
mediano plazo conforme el plan de formalización dé sus frutos, se espera un
crecimiento sostenido por encima del 6% en el escenario del plan de
gobierno de Fuerza Popular.
La prudencia fiscal
permite a Fuerza Popular obtener tasas de inflación y niveles de deuda
inferiores a las que obtiene PPK especialmente en los años finales del periodo
de simulación.
El manejo prudente
de la política fiscal del plan de Fuerza Popular permite atraer la inversión
privada especialmente la extranjera a lo largo de todo el periodo de
simulación.
El plan de gobierno
de PPK es bastante preciso en la cuantificación de las medidas que propone,
especialmente en lo que respecta a reducciones de impuestos y a niveles de
gastos tanto sociales como de inversión pública.
La simulación de
estas propuestas genera niveles de déficit público superiores al 3% del PBI
para todos los años del periodo de simulación. Estos elevados déficits permiten
inicialmente la reactivación de la economía (ayudados por la inversión
extranjera), pero el crecimiento acelerado de la deuda pública, aunada a la
elevada deuda contingente (ONP y deuda agraria), a la elevada deuda privada y
la creciente inflación asociada a la persistencia del déficit fiscal, genera un
riesgo de pérdida del grado de inversión y una retracción de la inversión
reduciendo las tasas de crecimiento del PBI en los últimos años del periodo de
gobierno de PPK.
El proceso de
formalización basado en la reducción progresiva del IGV no da los resultados
esperados debido al aumento del sueldo mínimo y la baja productividad del
sector informal.
La persistencia de
la inflación hace que los niveles de pobreza se encuentren por encima de los
niveles del Escenario Base. Lo mismo ocurre con el índice de desigualdad.
Las simulaciones
del modelo arrojan un claro veredicto respecto al impacto de las medidas
propuestas por cada plan de gobierno en el bienestar global de la sociedad.
Resta saber si el electorado tomará en cuenta el mensaje que arrojan las
simulaciones del modelo PREDICEperu o se dejará llevar por el mensaje populista
de los partidos políticos que buscan maximizar el impacto sobre las necesidades
inmediatas de la población sin tomar en cuenta las restricciones económicas que
el mundo moderno impone y sus consecuencias en el mediano plazo.
ELECCIONES, PARTIDOS, ENCUESTAS, MEDIOS,
PSICOSOCIALES
El Comercio
La
candidata presidencial de Fuerza Popular, Keiko Fujimori,
alcanza 52,6% de votos válidos en simulacro de Ipsos para América TV. Pedro
Pablo Kuczysnki (PPK)
obtiene 47,4%.
En
votos emitidos, Keiko
Fujimori llega a
46,1%, mientras PPK alcanza 41,6%. En blanco o viciado
votaría un 12,3%.
En
el simulacro
de Ipsos anterior, difundido por El Comercio el domingo 15 de mayo, Keiko Fujimori llegó a 50,2% de votos
válidos, mientras PPK alcanzó
49,8%. En votos emitidos, la candidata obtuvo 44,1% y su
contendor, 43,8%. Un 12,1% dijo que votaría en blanco y viciado.
De
otra parte, en la encuesta de Ipsos simultánea al simulacro, Keiko Fujimori llega a 41% y PPK obtiene
38%. En el pasado sondeo, publicado el 15 de mayo, la ex congresista llegó a
41% y el ex primer ministro, a 42%.
Acorde
a la distribución del voto por zona geográfica, Keiko Fujimori obtiene 45% del voto en Lima y PPK llega
a 42%. En el interior, la candidata alcanza 39% frente a 36% de su contendor.
Ficha
técnica de simulacro: Muestra: 1.803 entrevistados. Nivel de representatividad:
83,3% de la población electoral urbana y rural del Perú. Fecha de aplicación:
del 19 al 20 de mayo del 2016. Margen de error: +/-2,3%. Nivel de confianza:
95%.
Ficha
técnica de encuesta: Muestra: 1.823 entrevistados. Nivel de representatividad:
83,3% de la población electoral urbana y rural del Perú. Fecha de aplicación:
del 19 al 20 de mayo del 2016. Margen de error: +/-2,3%. Nivel de confianza:
95%.
El Comercio
Cuatro
analistas examinan el debate presidencial de los candidatos Pedro Pablo
Kuczynski (PPK)
y Keiko Fujimori. Explican las actuaciones
que tuvo cada uno y la repercusión que podrían causar en los electores. También
formulan recomendaciones para el segundo debate.
1.
¿Quién ganó el debate?
2.
¿Este debate tendrá influencia en la intención de voto de los candidatos?
3.
¿Qué deberían modificar Keiko
Fujimori y PPK para
el debate del próximo domingo?
Pedro
Tenorio. Periodista y analista político
1.
Creo que por puntos ha ganado Keiko
Fujimori, porque un debate, además de propuestas, es empatía
con la audiencia. En este caso, quien estuvo más ágil no solo para las
críticas, sino además para las respuestas fue Keiko.
Hay un plano racional y un plano emotivo. En el racional, ambos tienen
propuestas interesantes. En el emotivo, a ella la vi más conectada con la
cámara y la audiencia. A PPK siento
que le faltó intensidad en la exposición y demostrar que es un político que
quiere ganar la elección.
2.
Puede influir en el sector que aún no ha tomado una decisión clara con respecto
a quién va a apoyar, o que incluso en este momento apoyando a un candidato
podría cambiar su voto en los últimos 15 días. En toda elección hay un voto
duro que difícilmente cambia y otro que puede modificarse en base a errores o
actitudes desafortunadas de un candidato. Los debates y sus resúmenes sí son un
espacio que la gente utiliza para decidir, pero en un público reducido. Muchos
van a esperar al segundo debate para tomar una decisión.
3.
Tienen todavía que afinar mejor su mensaje. PPK conoce
sus propuestas, pero tiene que practicar más la comunicación y la emotividad.
Quizás está enfatizando su lado de expositor y conferencista, pero no el de un
político. Un político tiene que estar mucho más en el llano, le ha faltado más
la parte emotiva, tocar nervios. PPK tiene
que hablar a los padres que vivimos preocupados por la delincuencia. Keiko ha
utilizado muchas medias verdades y ataques, quizá perfilar mejor sus propuestas
podría ayudarla.
Carlos
Tapia. Sociólogo y analista político
1.
Se ha notado a una Keiko
Fujimori más
agresiva. En el caso dePPK, comenzó a la defensiva y
después mejoró. Creo que el debate, si lo vemos desde las pullas políticas, Keiko tuvo
algunos excesos. Si lo vemos desde un aspecto programático, en un 80% han
coincidido sobre cuestiones generales. En cambio, las diferencias principales
han sido las que ya conocíamos y que ayer ratificaron. Se han mantenido en
función de sus mismos bolsones de electorado. Por eso, cuando alguien pregunta
quién ganó el debate, yo pregunto, ¿para quién?
2. PPK tiene
la obligación de ganar una mayor tasa de indecisos. La última encuesta de Ipsos
muestra que el empate entre ambos se rompió. Entonces, para que él gane más
indecisos tendría que tener una propuesta más clara, distinta en lo central y
firme. El elector ya está empezando a fijarse en quiénes son los que van a
ganar. Algunos preferirán votar por ganador. Para que haya un cambio en la
tendencia de votos, debió haber un derrotado de lejos. Y no lo ha habido. Está
dentro, como se dice, del error estadístico. Se puede decir que alguien ganó el
debate con 52% frente a 47%.
3.
Fujimori debería dejar de insistir en las pullas porque creo que eso no le está
cayendo bien a los electores. Ya las polémicas de quién fue corrupto creo que
ya no acumulan fuerzas. Ya el pueblo no quiere mucho de eso, sino más bien
elementos de diferenciación en propuestas. PPK sigue
sin tener precisiones en algunos temas que Keiko sí
sabe qué hacer para ganar votos. Por ejemplo, cuando PPK ofrece
el ministerio de las regiones. Quien conoce las regiones sabe que justo eso es
lo que no quieren.
Luis
Núnes. Analista político
1.
Considero que el debate fue ganado por bloques. Esa es la forma de enfrentar un
debate. Vi un PPK menos
rígido. Un poco más distendido. Por otro lado, vi a una Keiko Fujimori más pegada a un libreto que incluía
las pullas, las cuales pueden tener un efecto emocional en el televidente. No
es una cuestión de quién ganó el debate. Me parece más bien que se perdieron
valiosos minutos y no explicaron cómo van a hacer algunas de sus propuestas. Me
da la impresión de que los dos candidatos midieron fuerzas con miras al próximo
encuentro.
2. Fujimori y PPK están
en un momento de coyuntura polarizante. Por ello están buscando, a través, por
ejemplo, de las formas en que enfrentaron el debate, los votos de algunos
indecisos. [Según el último simulacro de votación de Ipsos para América TV,
difundido ayer, el 12,3% votaría blanco o viciado]. Así que los votos de los
indecisos son los que ellos requieren. Recordemos que el resto, utilizando un
lenguaje electoral, son los votos duros.
3.
Para el próximo debate, los dos candidatos deben reforzar el cómo realizarán
sus propuestas. Por ejemplo: si tenemos una brecha de infraestructura, ¿cuánto
vamos a invertir para poder cerrar esa brecha? Hay que tener en cuenta que el
tema de la seguridad ciudadana es el que se viene en el próximo debate. Es el
tema vital. Por eso, considero que el cómo es lo que la gente está escuchando.
Por otra parte, en algunos momentos la señoraFujimori nos
daba una lista de promesas, como si se tratara de una lista de lavandería. Esas
listas de lavandería deben ser aterrizadas.
Arturo
Maldonado. Politólogo
1.
Lo que se vio fue a un PPK que empezó muy frío y que fue tomando
poco a poco más viada, pero que no terminó de despegar. En cambio a Fujimori se
la vio en su rol de siempre: alumna aplicada, fiel a su guion, que sale bien
librada pero sin destacar, frente a un competidor que estaba frío y le dio una
ventaja de medio debate. La conclusión es que ella sacó una ventaja. Ella fue
la que dirigió el debate, impuso los temas y la que hizo que el otro candidato
respondiera.
2.
Aún hay un 13% de electores que se encuentran indecisos y no creo que este
debate termine por definir su voto. A dos semanas de la elección, no creo que
lo que se ha visto termine por ser el elemento definitorio y tampoco pienso que
lo sea el siguiente debate. Creo que más importarán los hechos de la misma
campaña que ocurrirán en los próximos días que los mismos debates.
3. Keiko tiene
el partido más fácil. Si las tendencias siguen, tendrá una ventaja que le
permitirá ir más tranquila. En cambio, PPK tiene
un reto mayor, deberá replantear su presentación. Debe darse cuenta de que los
mejores momentos del debate fueron cuando salió a la ofensiva y cuando se
mostró más enérgico, y eso es lo que debería enfatizar en el siguiente
encuentro. No centrarse tanto en el aspecto técnico, sino dirigirse al
ciudadano resaltando los defectos del oponente. En el siguiente debate tendría
además que mostrar algo que robe el show y que tenga un efecto similar al que
logró Keiko cuando en el debate del 3 de abril firmó un compromiso de honor.
El Comercio
PPK, un chico que no enamora
Enrique Pasquel
PPK es como el chico que todas consideran
un buen partido, pero del que nadie se tiempla. El que ofrece una relación
cómoda, pero algo aburrida. Aquel que promete un matrimonio estable, pero sin
pasión.
PPK tiene una hoja de vida llena de grandes
logros profesionales y sin las típicas acusaciones de corrupción que plagan las
de varios de sus contrincantes. Esto, sin embargo, no ha sido suficiente para
permitirle construir un aura de liderazgo que inspire a los peruanos. Asimismo,
si bien existe cierto consenso en que tiene el plan de gobierno más serio
(especialmente si se lo compara con la suma de vaguedades e ideas populistas
difundidas por sus contrincantes), tampoco tiene propuestas revolucionarias. PPK transmite la seguridad de la
vida sin sobresaltos, pero no el cambio radical con el que tantos peruanos
sueñan. Su campaña tranquiliza, pero no ilusiona.
A pesar de ello, esto podría terminar siendo
suficiente para que el Perú termine casándose con PPK. Y es que, si bien no ha hecho una gran campaña, ha tenido la
suerte de que sus competidores hayan hecho campañas desastrosas. Acuña y Guzmán
fueron excluidos por el JNE por sus propios errores. Alfredo Barnechea se
desinfló porque no pudo controlar su soberbia y su pituquería. Verónika Mendoza
no creció más por tener un discurso en extremo radical. Así, PPK pasó a segunda vuelta. Y,
ahora, está cerca de convertirse en presidente gracias a que Keiko cargaba con
una bomba de tiempo en su mochila: Joaquín Ramírez, sospechoso de lavado de
activos y de estar envuelto en una investigación de la DEA. Una bomba que
podría asustar a un número de electores suficiente como para poner a PPK adelante el día de las
elecciones.
Si llega a la presidencia, sin embargo, le va
a ser muy complicado gobernar un Perú al que no ha enamorado. Difícilmente
podrá pasar alguna reforma en un Congreso sin mayoría si no cuenta con gran
respaldo popular. Le será complicado lidiar con los conflictos sociales si no
se convierte en una figura inspiradora. Y no tendrá cómo enfrentarse a todos
los grupos opositores si no le ofrece una ilusión a los peruanos que lo
apoyen.
Por esto, para el líder de Peruanos por el
Kambio, los días que quedan hasta el 5 de junio van a ser cruciales no solo
para la elección presidencial, sino también para crear las condiciones que
permitan asegurar la gobernabilidad del país en un eventual mandato suyo. PPK no puede tener una relación
tibia con el Perú, salvo, por supuesto, que no le importe que ella termine como
la de aquellos matrimonios que solo se sostienen por la comodidad de la rutina.
Peru21
Después del debate
Juan José Garrido
Uno. Pocos minutos antes del debate, Canal 4
presentó los resultados de la última encuesta de Ipsos, en la que aparece la
candidata Keiko Fujimori con 5.2 puntos por encima de PPK (en el
simulacro, voto válido, 52.6% contra 47.4%). Sin duda, este es un golpe
psicológico y emocional para ambos candidatos: al primero lo lleva a asumir que
se tiene que jugar –sí o sí– la vida en el debate, mientras que para la segunda
es una tranquilidad, más aún después de la semana tan turbulenta por la que
transitó.
Dos. Desde el inicio se plantearon las
estrategias: mientras PPKtrataba de resaltar sus condiciones como técnico
y señalaba los riesgos que han sido levantados durante la campaña (corrupción,
narcotráfico, etc.), Keiko Fujimori aprovechó su conexión con el Perú profundo,
señalando los vínculos de PPK con los grandes empresarios. Como hemos
señalado varias veces, los ejes del debate son, para Fujimori, la candidata de
los pobres versus el candidato de los ricos y, para PPK, el candidato de
la democracia y la honestidad frente a la candidata del fujimorato, con todo lo
que recuerda dicho pasado. Ambos trabajaron en dicha línea.
Tres. En un debate entre PPK y
Keiko Fujimori, quien la tiene más difícil es PPK: a Fujimori le basta con
no ser atropellada para salir bien, mientras que a PPK se le exige
pulverizarla. Quien haya escuchado el debate concordará conmigo en que ello no
ocurrió. A PPK se le vio como siempre, tranquilo, técnico, aunque
buscando espacios para el ataque (mencionó el narcotráfico innumerables veces),
y –como ya lo he mencionado– no sé si esa es una buena estrategia: de él se
esperan ideas y propuestas, no pullas y adjetivos. Esa era su ventaja, y al
ponerse pico a pico con Keiko Fujimori, quien lleva años de entrenamiento
político, pues esa ventaja desaparece. A Fujimori se le vio muy suelta, mantuvo
sus propuestas técnicas dirigidas a su electorado y llevó a PPK a
defenderse más de una vez.