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MEDIA
COLUMNA
El
gesto Pelosi
Jorge
Morelli
@jorgemorelli1
Al golpe feroz
propinado por la pandemia contra la economía global, al que se sumaría luego el
de la guerra en Europa, el partido demócrata en el poder en EEUU no ha tenido
mejor idea que agregar la presencia de Nancy Pelosi en la isla de Taiwán.
Se trata de un gesto de
respaldo a la isla que es el primer frente del poder norteamericano en el Asia
ante las costas de China. Este frente es equivalente a lo que, desde la crisis
de los misiles en 1962, hace 60 años, ha representado Cuba ante las costas de
Estados Unidos.
Desde luego, hay una
gran distancia entre los misiles rusos y la señora Pelosi, que no es una rampa
de lanzamiento sino de palabras que se lleva el viento.
Esto es precisamente
lo que hace al gesto políticamente irrelevante, pero económicamente destructivo
para la economía global y la propia economía americana.
La sola presencia de
Pelosi en Taiwán -aun sin lanzar ningún misil verbal desde su rampa- ha
derrumbado sin necesidad alguna nuevamente el precio del cobre en el mercado
global, que se recuperaba apenas de la caída brutal desde los casi cinco
dólares la libra de marzo pasado a tres y medio dólares la libra, una caída de
30% que ha causado ya en los países emergentes que exportan cobre -como el Perú
y Chile- una devaluación alarmante -el dólar en Lima se acerca ya a los cuatro
soles-, una caída de 20% de las acciones mineras en la BVL y la amenaza de
generar un derrumbe de la recaudación tributaria.
Y la respuesta de
China ha sido demoledora. Ha cortado de un tajo todas las relaciones
institucionales construidas pacientemente entre ambos Estados desde aquella
primera e histórica visita en 1972, hace 50 años, de Richard Nixon y Henry
Kissinger a Mao Tse Tung en Pekín, que Nixon llamó “la semana que cambió la
historia” porque inició el deshielo de 25 años de congelamiento y puso los
cimientos de las políticas mutuas durante medio siglo hasta hoy.
Esta visita de Pelosi
a Taiwán ha sido una provocación políticamente banal y económicamente costosa.
EEUU lucha hoy contra
la inflación con alzas muy fuertes de la tasa de interés. Eso ha causado un
alza de 13% del precio del dólar en nueva York (el Dollar Index) desde su valor
de hace un año. Hoy el dólar detiene su alza por el pánico global que causa un
posible conflicto bélico entre EEUU y China, de consecuencias impredecibles.
La lucha contra la
inflación recién se ha iniciado y avanza sin resultados hasta la fecha. Ni la
inflación ha sido “transitoria” -como dijeron Biden y Powell, el presidente de
la Fed-, ni hay espacio ya para un “aterrizaje suave” de la economía americana.
Pero, a pesar de la debilidad
de su economía, la Casa Blanca elige hacer un gesto de desafío a China cuyas
consecuencias EEUU tendrá ahora que explicar. Mala idea.
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