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MEDIA COLUMNA
Viento de palabras
Jorge Morelli
@jorgemorelli1
jorgemorelli.blogspot.com
Las tres oportunidades en que el Presidente ha hecho uso de la palabra
en público luego del Mensaje –dos en la Plaza de Armas y una en inusual
intervención durante la Parada Militar- permiten trazar los puntos de una nueva
tendencia.
Primero, han desaparecido los ataques políticos a la oposición y parece
haber cesado el señalamiento de culpables de los males del Perú que ha saturado
implacable sus discursos durante cuatro años. Ahora que el gobernó ya no
controla agenda política perdida a manos de la oposición, esta nueva humildad
impostada es una forma de victimización.
Segundo, ha reaparecido la imagen de que la Independencia alcanzó la
libertad, pero no la igualdad. Es una frase que Velasco Alvarado solía usar (la
libertad política, decía, pero no la económica). Otra expresión velasquista que
regresa es la de los cambios “irreversibles”.
En suma, el énfasis en la victimización política y en la igualdad social
(y en los programas sociales para alcanzarla) parece el nuevo logo del
humalismo. Obviamente, se trata de una nueva estrategia, una nueva narrativa,
en la que el “legado” de la pareja presidencial a la historia son los programas
“irreversibles” que permiten alcanzar la igualdad.
Desafortunadamente para el legado, esto es falso, es una mentira blanca,
un sucedáneo, un placebo. Lo que permite alcanzar la igualdad es el crecimiento
para recaudar más impuestos con que pagar por la igualdad de oportunidades en
salud y educación. Los programas sociales -la sumatoria de los que imitan la
trayectoria de la vida -CunaMas, Beca18, y Pensión 65- sirven desde luego porque
alivian a los segmentos más pobres que necesitan esa ayuda en la transición
hacia la igualdad que el crecimiento trae. Al apuntar hacia grupos de edad
tienen límite natural en el tiempo. Si hay crecimiento, no necesitan ser “irreversibles”.
A la larga, entonces, aun sin programas sociales habrá menos desigualdad si hay
crecimiento. Sin crecimiento, en cambio, no hay igualdad posible. Lo que hay es
dependencia del gobierno de turno, clientelismo y demagogia “irreversibles”.
Lo peor es que la nueva narrativa de la pareja presidencial da por
sentadas la libertad y la autoridad. Pero la libertad no está consolidada en lo
económico en el Perú porque no hay propiedad sin títulos que la respalden y protejan
de mafias que hoy infiltran los registros públicos. La Constitución dice que la
iniciativa privada es libre, pero en realidad la creatividad de los peruanos es
trabada todos los días por el Estado.
Y menos aún se halla asegurada la autoridad política en el territorio,
lo que es el fundamento del Estado, con vastas porciones del país ocupadas por
el narcoterrorismo y redes de organizaciones criminales que compran impunidad
al Estado.
Atender solo a la igualdad, entonces, dando por sentadas una libertad
y una autoridad que no existen es preferir las apariencias a la realidad y tomar
al rábano por las hojas. Y, en tal predicamento, declarar irreversibles unos programas
sociales que no son sustentables son solo ingenuas intenciones y palabras que
se lleva el viento.
REPORTE
DE NOTICIAS en Internet
Las siguientes notas periodísticas de política y economía han sido
seleccionadas, editadas y ordenadas
temáticamente. No se las debe citar como
tomadas directamente de sus fuentes originales, las mismas que se indican sólo
como una forma de reconocer el crédito y agradecer la cortesía.
GOBERNABILIDAD,
DEMAGOGIA, AUTORITARISMO, DEMOCRACIA
El Comercio
Tal
como ocurrió
ayer en las puertas de
Palacio de Gobierno, el presidente Ollanta Humala volvió a ofrecer un inusual discurso, esta vez en
la Gran Parada y Desfile Militar. Después de entonar el himno, el jefe del
Estado se dirigió a los peruanos en un breve mensaje.
"Los grandes cambios no se
producen de la noche a la mañana. Son procesos y eso es lo que queremos hoy día
[...] Todos somos peruanos, todos somos peruanas. Este
es un gobierno de inclusión social", indicó
al mandatario, quien estuvo acompañado de su esposa, Nadine Heredia.
En este discurso, Ollanta
Humala recordó el
esfuerzo que costó al Perú lograr su independencia de España y constituirse
como una república. "La
nueva independencia que tenemos que consolidar es la lucha contra la
desigualdad, contra la inequidad",
expresó.
"Al Perú nadie lo puede parar
y tenemos que seguir trabajando en esa senda. Muchas gracias a todos
ustedes. ¡Que viva el Perú!", concluyó el presidente y dio pase al desfile
militar.
En el discurso que dio ayer tras
su mensaje a la nación ante el Congreso, Ollanta Humala también hizo énfasis en la inclusión
social. "Cuando termine este período, el Perú habrá cambiado",
enfatizó.
El Comercio
Keiko
Fujimori, lideresa de Fuerza Popular, dijo que el mensaje
a la nación por Fiestas Patrias fue un relato de "pequeños
logros aislados".
"Nos ha relatado pequeños logros aislados, pero
sin generar esa confianza que el país está necesitando", dijo a su salida
del penal de Barbadillo, a donde acudió por el cumpleaños de su padre, el ex
presidente Alberto Fujimori.
Para la lideresa política, el mensaje a la nación de
Ollanta Humala fue "la pérdida de una gran oportunidad" pues se dejó
de "dar un mensaje con una visión de país".
"La ausencia más importante que ha habido en este
mensaje a la nación son los temas de seguridad ciudadana", señaló. En esa
línea, dijo que, pese a que fueron buenas las medidas que se tomarán sobre
el uso del uniforme policial o las penas por sicariato, no hubo "nada
más". "Lamentable que no se haya tocado políticas de Estado.
Se ha tocado medidas muy aisladas y pequeñas, pero con falta de visión",
anotó Keiko Fujimori.
Finalmente, saludó la elección de Luis Iberico como
presidente del Congreso y dijo que él "va a tener como prioridad colocar los
puntos de agenda pensando en el país y ya no en lo que la pareja presidencial
decida".
El Comercio
El
líder del Partido Aprista Alan García consideró hoy que el
mensaje a la nación del
presidente Ollanta Humala fue “una hora de palabras al viento”.
Cuestionó que Humala, en su discurso, no haya hecho
ninguna autocrítica a su gobierno ni haya dicho las medidas que tomará para
dejar un país económicamente estable.
“Lo importante no es una hora de palabras al viento. Es
la verdad de cuatro años de mal gobierno y cómo evitar su herencia negativa en
el futuro”, escribió.
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